sábado, 30 de diciembre de 2006

SABOREÁNDONOS

Y llegas como siempre, a la hora acostumbrada
Cada vez espero menos tiempo a que entres
Te beso al llegar
Antes de cerrar puertas y ventanas
Me agarras de las nalgas empujándome hacia ti
Te desabotono la camisa roja
Y te voy besando desde tu cara, pasando por toda ella
Introduciendo mi lengua en los agujeros de tus orejas,
Me excita hacerlo
Beso tu cuello
Y bajo hacia tu pecho,
Mordisqueo cada uno de tus pezones,
Luego tu ombligo velludo
Llegando a tu sexo
Ya endurecido
Y erecto
Lo rodeo con mi lengua y labios
Lo succiono hasta sentir un suave líquido
Que sabe a ti
Me incorporas
Metiendo tus manos bajo mi blusa
Bajo mi falda
Me sientas en el sofá
Te arrodillas y
Vas besándome los pechos, uno a uno
Llegas a mi sexo
Chupas mi clítoris
Lo endureces y me saboreas
Te vuelves hacia mi cara y nos besamos en la boca
Saboreándonos a la par, al unísono….

jueves, 28 de diciembre de 2006


Tu, sin mas porque
tu, que bésame
tu, me tienes de furriel de un roto de tu piel
Tu, como la cal que húmeda es mortal
tu, blanqueas mi razón calando hasta el colchón
Tu.Tu,Tu Tu
T Tu Tu Tu
Tu Tu Tu
TU montada en mi
Yo, montura hostil
Tu, me abrazas con los pies y yo lamo el arnés
Tu, y sin ti yo no
Tu, y sin ti ya no
Tu, me has hecho dimitir y hoy se dice así:
Tu Tu Tu Tu
Tu Tu Tu Tu
TU Tu Tu

domingo, 24 de diciembre de 2006

EN EL LADO DEL ESPEJO


Aquí, allí, conmigo
Contigo, en ti, en mí
Coloréame sonriente tras el espejo siempre
Amoroso, te gusto culpona?
Me gustas siempre
Y si no también
Espejosa me ves tras tu mirada
Tu mirada que no pestañea
Para no perder detalle
A ti en mí
Que rico si estas debajo de mi
Tú arriba, yo abajo
Tu boca en mi boca
Mis piernas rodeándote
Te incorporas y pongo mis piernas en tus hombros
Y tus manos en mis pechos
Primero los ojos y después los pechos
Luego el resto
Desde las manos hasta las nalgas
Desde los pies al cuello
Pero siempre lo que mas los ojos
Y luego los pechos
Solo es el orden de lo que te atrae
Te parecen lindos mis ojos y después mis pechos
Ya los conoces ambos
El resto te gusta demasiado
Pero mucho menos que estos
Que lindo el orden de tus gustos en mí
Con una mirada se comenzó
Me lees dulce, tierna,
Inteligente, veloz,
Sabia, plena y entera
Será tu diccionario?
También me gustas de muchas maneras
Y que te erecciones demasiado
Es calor, es deseo
Te gusta sorprenderme
Me inspiras calores, deseos, ternuras y mas….

sábado, 23 de diciembre de 2006

NI ROMANCE, NI POESIA Y MENOS AMOR

HOY NO QUIERO HACER EL AMOR (K. P.)
Simplemente quiero coger
Dos de la tarde
Vacío altercado
Sexo apasionado, sin ápice de amor
Lujuria pura, placer animal

En esto me convertí
Es para esto que nací

Tensión de cuerpos
Sudor en abrasión
Entre tus piernas
Desenvaino mi arma
Y nos sumergimos
En una estocada de placer

Tu cuerpo es mío
Lo subo. Lo bajo, y azoto a placer
Mi cuerpo es tuyo
Me domas, me marcas,
Me tomas, soy tu rehén

No hay
No habrá
No hubo nunca
Tregua alguna
Que la paz
Pudiese saldar
No hay cuartel
No hay descanso
No hay más que besos animales
Sexo salvaje
Cuerpos sudados
Gritos extasiados
Y orgasmos reales
Nunca simulados.

No habrá jamás
Descanso
Seguiremos viviendo en la cúpula
Seguiremos llevándonos al límite

Yo explorando cual espeleólogo
Tu atrapándome en tus pliegues
De placentera carne
Yo entrando y saliendo de ti
Tu absorbiendo mi ser

No quiero hacerte el amor
Solo quiero coger
Volvernos animales
Una sola tarde
Una eternidad significada
Un espacio atemporal
En donde mi conciencia se perderá.

miércoles, 20 de diciembre de 2006

REVOLUCION DE SENSACIONES

La humedad del verano, el calor fundiendo sudores, resfalando tu mano por mi muslo, sintiendo cada una de tus marcas en las huellas de tus dedos por mi lengua, salado, dulcemente salado, saboreando cada centímetro de tu sexo... erizados los poros con cada aroma de los tuyos, metiendo mi nariz en tus rincones y erecciones, el dorso de mi mano en toda la piel de tu cuerpo, escuchando el pulso de tu sangre correr acelerda en tus pliegues, desde tu cuello, bajando a tus axilas, tu entrepierna, tus muñecas, tus rodillas...sentir en mi piel tu respiración agitada y el susurro de tus roncos gemidos cuando estás al borde de estallarme dentro, ver tus ojos semicerrados impestañeables... moviéndonos sincronizados los galopes, los golpes de tu pelvis contra la mia, mis pechos bamboleantes acercandose a tu boca que gustosa los succiona...gustarte, olerte, escucharte, mirarte, saborearte, percibir mezcladas nuestras humedades como aceite de oliva bañándonos enteros en su viscoza densidad inseparable...

martes, 12 de diciembre de 2006

HOY A LA MAÑANA

Hoy, solo en este momento siento el alma acongojada de extraña sensación, mezcla de calor, amor, emoción.
Hoy me gusta dejar el auto y viajar en bus, mirar por el cristal, incluso los fierros oxidados me parecen hermosos.
Hoy casi no me molesta la luz del sol, veo las flores en los parques, el prado húmedo del riego matinal y te recuerdo porque me gustas alegre, sonriente, aceptando la vida tal como se nos da, tu, allí, yo aquí.
Hoy recordé a Edgardo, aquel señor fumador de amapolas, que era juglar…
Hoy te llevo en un bolsillo donde solo habitan bellas sensaciones, como la luz de tu mirada cuando volamos el uno sobre la otra y viceversa, sin separar nuestros cuerpos ni dejar de hacer el amor.
Hoy me parece sentir el aroma, el sabor, la textura de tu sexo, lo llevo en mi interior, meciéndome contigo bajo las ramas de los olivos al viento que llueven su polen sobre nosostros.
Te siento tibiamente mío…
Tómame
Introdúceme
Y no te salgas de mí

miércoles, 6 de diciembre de 2006

Un dia lo recibí y lo guardé... me gusta

Tu cuerpo se insinúa y ahí estoy yo, tieso, duro, preparado…
No hay dudas de tu entrega, tampoco de la mía.
Te deseo y no median explicaciones, te abres y me recibes, húmeda y hospitalaria.
Duro y ardiente me acerco a tu sexo con ganas de frenético baile en tu interior.
Tus labios me llaman y yo los busco, con mis palabras, mi lengua, mi sexo.
Me pides que no me demore, que entre y sacuda nuestras humanidades,
En centrífugo enredo nos amamos, nos elevamos, nos caemos, nos babeamos.
Mi saliva baña tu cara, y tu boca no para de decir cuánto placer hay dentro tuyo…
Tus senos no hacen otra cosa que alimentar mi deseo, tu culo es el apoyo de mis manos y fantasías…
Las palabras se entrecortan, la respiración también, balbuceamos sexo, cariño y desenfreno.
Te pones en cuatro para que te cabalgue, esclavo de tu cuerpo como soy, cumplo tus pedidos:
Por atrás, con mi inmensidad, te penetro suavemente, como insinuando el placer que nos invade.
Me expulsas de tu sexo y quedo sorprendido, te das vuelta, me miras con complicidad y suficiencia y te engulles toda mi verga con gran placer.
Pareciera el límite de mi tolerancia.
La saboreas brevemente y me exiges la última penetración. Antes de complacerte, refriego mi miembro en tus senos, dejando un hilo de semen en uno de ellos…
Me exiges penetración…
Como soy esclavo de tu cuerpo, obedezco y muero la pequeña muerte dentro de ti.

MACHO Y HEMBRA

El sol los encontró abrazados.
Sintiéndose tibiamente.
Envolviéndola el con su cuerpo.
Entrelazando sus piernas.
Las manos en su sexo duro.
Las manos en sus pechos grandes.
Su sexo erguido, suave, empujador.
Sus pechos erizados y sus pezones alzados.
El frío y el viento los despertó.
Se olfatearon.
Se apretujaron.
Se besaron.
Se saborearon. Se chuparon.
Cual macho y hembra, se lamieron.
Como sanando sus heridas.
Rozando su áspero mentón por toda su espalda.
Deslizando su lengua por su glande estirado.
Deslizando sus labios por su duro clítoris.
Se acunan.
Se montan.
Se mecen.
Uno dentro del otro.
Empujando sus nalgas contra el otro y la otra.
Deseándose infinitamente.
Encontrándose en un orgasmo mortal.
Muriendo y regresando a la vida.
Empapándose de sus jugos.
Bebiéndolo ella a el.
El a ella.
Entrelazando sus dedos.
Apretando sus manos.
Latiendo sus pulsos.
Dejándose muy quietos.
Y continuar deseándose.
Hasta el fin de los días.
Siempre acariciándose.
Suspirándose.
Protegiéndose.
Cuidándose.
Aprendiendo sus formas de memoria.
Grabando sus pieles en sus instintos
.

lunes, 4 de diciembre de 2006

SECRETA COMPLICIDAD

Siempre hubo insinuaciones, desde sus manos al estirarse ella, bajo sus senos, su brazo desnudo de hombre rozando el cuello sensible de ella, la mirada directa a su escote, diciéndole desabrocha ese botón para ver lo que mas me gusta de ti, tus pechos.
Preguntando intimidades, muy directo, demasiado, al punto de hacer que los otros observen maliciosos, ella se sonroja, pero le gusta sentir su aroma y aunque no es guapo tiene esa actitud de macho, esa postura, esa voz, el beso en su no rasurada barba con su olor y su aspereza, ella tampoco lo es, solo le gana su sensualidad y formas que se ven bajo sus ropas. Ella sabe a donde van sus intenciones, las de los dos. Si ella le diera solo una demostración el iría directo a un encuentro cotidiano mas íntimo y perdurable. Pero solo se encuentran unas veces durante la jornada, lo suficiente para mirarse , sin hablar.
Sintiéndose ambos en esa energía sexual que fluye pero que no termina de unirlos, solo besos furtivos y abrazos con intención de sentir el sus opulentos senos y que ella su erecto miembro bajo sus ropas.
La última vez fueron mas lejos, con las desinhibiciones de los cigarrillos de esos que dan risa, fueron dos y fue mas de un roce. Fueron sus bocas en encuentro con sus sexos, apretados en un espacio pequeño, sin hablar, solo risas alucinadas entre el ruido del tráfico, escondida ella entre sus jeans, escondido el entre su pollera. Un dejarse llevar sin vergüenza, sin memoria. Ahora esperan cada viernes por la tarde cuando ambos terminan una cansada y deprimida semana, allí liberan sus instintos y deseos bajo la puesta del sol. Sin hablar. Continuarán hasta que deje de ocurrir, cuando solo perdurarán los recuerdo de sus olores , sus sabores en la secreta complicidad, concientes de esos ocultos encuentros de viernes que pronto terminarán con la llegada de final una etapa mas…

domingo, 3 de diciembre de 2006

SEXO Y ADICCÓN

He adivinado algo de tus pechos
Te deseo
Al desearte me excitas
Te Besare tu cuello
Y mis manos apretaran tu cintura
Mis manos bajaran a tus nalgas muy redondas
Mis manos te las recorren
Ya terminaste de excitarme
Me gustas buena
Y mala
Las dos caras
Me endiablaste con tu nalga
Me gustas bruja
Para hacer diabluras embrujadoras
Por que el mundo es nuestro suelo
A veces volamos
A veces mundeamos
A veces nalgueamos
Y solo haría lo que tú me dejases hacerte
Te miraría o te cuidaría
O te daría agua, solo lo que tú pidieses
Y mi cuerpo se resiste
Y te besaría entera
Desde tu nalga hasta tu otra nalga
Pasando por tus labios
Y quedándome en tus ojos
Reiniciando por tus pechos
Del uno al otro
Sin olvidar tus pezones
Y concentrándome en tu ombligo
Para recaer en tu espalda
Golondrina ombliguera
Al compás de mis deseos
Mécete en mi cuando estoy dentro de ti
Y abres tus piernas y me acoges mecedor
Me estremeces todo cuando me respondes
Me erizas los sentidos
Se me para.........
Estoy sintiéndote
Te deseo
Te redeseo
Largamente profundizándote
Arriba de mí
Y tus pechos que se balancean sobre mí
Hasta rozar mis labios
Y mis manos que acarician tus nalgas
Y desnudos los dos
Tú, yo y tus muñecos
Una manta nos cubrirá, después caerá al suelo
Intercambiando erizamientos
Mi piel se siente abrasadora
Por que nos solo mis manos abrazan
Mi olor es de abrazo también
Huelo a olivo
Es el sentimiento puro
Solo las sensaciones y yo
Contigo envolviéndome
Se termino el deseo
Tu ombligo perdura
En mí siempre
Bésame, Deséame Poséeme Embriagame Pero nunca digas que no te lo advertí creo adicción…

sábado, 2 de diciembre de 2006

Toda la vida

Yo no sabía que no tenerte
podía ser dulce como nombrarte
para que vengas
aunque no vengas
y no haya sino tu ausencia
tan dura como el golpe
que me di en la cara
pensando en ti.
Te acuerdas de ese día?
Como ayer.
Estás en ese tubo de luz?
Te vi llegar
Bajar del auto
Correr hacia mí
Entrar en mi piel
Promesas de verano
19 años, piel de manzana
28, piel de durazno
Manos que recorren mi piel.
Manos que no se atreven a tocarte.
Entera me desnudas.
Se escuchan las voces afuera.
No es trascendente.
Solos tu y yo aquí dentro.
Una noche muy oscura.
No hay luna.
Hace frío.
Que importa?
Estamos nosotros que nos damos calor.
Ansiosos tus dedos me hurgan.
La emoción me recorre.
Haces camino en mi profundidad impenetrada.
Te adentras con suavidad.
Te mueves despacio.
Acaricias mis pechos.
Un dulce dolor me estremece.
Tu boca en mi oreja.
Me dice “te amo”
Te creo y me creo.
Han pasado más de 20 años.
Tus manos.
Tus labios.
Tu saliva.
Todo tu cuerpo.
Cada centímetro recorrido.
Aprendí con el tiempo a sentirte entero.
Bebiste de mi todo.
Bebí de ti sin apuro.
Viscosos, tibios, del uno y del otro.
Mordidas, refregones.
Incrustados, agazapados.
Tanteándonos, retorciéndonos
Estremeciéndonos, meneándonos
Chupándonos, olfateándonos.
Porque siempre fuimos así, solo el uno del otro.
Y de nadie más.
Todo fue igual desde principio a fin.
Cada día inventando algo nuevo.
Nada faltó?
Nada.
Todo fue perfecto.
Hasta el último día.
Hasta la llegada de ella.
Tal como estaba escrito.
Me hiciste mujer.
Tú ya eras hombre.
Jamás me importó.
Y me quedaron tatuadas.
Tus huellas.
Nada se igualará jamás.
Todo lo que viene es solo el azar.
Ahora mi táctica es
quedarme en tu recuerdo
no sé cómo.

jueves, 30 de noviembre de 2006

CUERPOS QUE SE PRECISAN















Por estos días Elena solo recuerda su último encuentro con Emilio. Ese día sábado ambos en sus quehaceres, una a sus nuevos estudios en la universidad el otro a su trabajo. A pesar del sol la brisa calaba los huesos. Elena como todos los días sábados, siempre que sus hijos están comprometidos, lo llama a su móvil, Emilio le dice que lo llame cuando necesite de el, si no le responde es que su hija está con el, ella prefiere dejarle un mensaje: tengo mucho frió, necesito de tu calor… eso fue a la hora del almuerzo, en la tarde Emilio la llama y le dice voy para allá, ella respondió con voz adormilada de la siesta y lo espera, apenas 10 minutos los separan, casi no alcanza a vestirse y lo espera en pocas ropas pero muerta de frió, Emilio no se acostumbra al clima tan diferente al suyo, este es húmedo pero frío típico de la costa sur, el viene de un calor húmedo rodeado de montañas. Apenas entra en la casa y sin dar tiempo a encender la chimenea se meten en la ancha cama con muchos cobertores, mantas y edredones, desnudos se tocan ansiosos de calor, compañía y sexo, como siempre. Aun cuando hace solo un par de meses se conocieron saben cada uno lo que le gusta al otro. Se abrazan mucho, se tocan, se besan hambrientos, ella tierna y dulcemente toma su erecto miembro en sus manos y lo besa cuidadosamente, el la mira plácido y complacido, a el encanta eso y ella lo sabe, eso la excita mas aun. Emilio no se apura la deja hacer feliz, ella lo cabalga suave y sensualmente el no deja de mirarla…mamarrachito cuanto me excitas…..ella no habla pero mientras se mece sobre el lo besa en los ojos, nariz y boca, el encanta su aroma, el toma un pecho a la vez en sus manos como si fuera un pajarillo y se los besa despacio primero y mas fuerte después haciendo endurecer furiosos su pezones que no son grande en tamaño pero que se eriza al contacto de los labios de el, se dejan hacer, cambian, el la penetra suavemente desde arriba y le hace un orgasmo que le hace decirle cosas al oído: te voy a besar allí abajo para que me des un orgasmo en mi boca y así se lo hace, el sabe realmente complacerla y ella explota una vez mas, se enroscan húmedamente y se funden en una explosión urgente y al mismo tiempo, la sonrisa les queda en sus rostros. Es de noche pero temprano, se abrazan y se duermen muy juntos. Los dos saben que no deben comprometer más sentimientos de lo necesario, pero se necesitan, ambos están solos y la vida los tiene en el valle de la ola. Varias veces en la noche se despiertan solo para mirarse y saberse juntos, se abrazan, se acunan y duermen, despiertan y así hasta que el amanecer lo vuelve a excitar, el le toma la mano y se la lleva hasta su sexo ya endurecido, la pone boca abajo y la penetra suavemente acariciando sus pechos hasta conseguir tener el mas plácidos de los orgasmos ella y llenándola de su tibio fluido el. Como siempre el domingo desayunan, hablan mucho de sus vidas, Emilio tiene sus ojos mas azules de DIA contrarrestando con su piel blanquísima, sus manos grandes le envuelven la cara pasando sus dedos por el corto cabello de ella: estás mas linda.. Tu mas guapo, se besan, se acarician, se despiden, llevándose su alta postura de un metro ochenta, sus anchas espaldas de hombre maduro, se queda ella con su pequeña silueta mirándolo desde la ventana. Ninguno sospechó que deberían postergar sus encuentros clandestinos, a la semana siguiente Emilio partió a su tierra, le avisaron que su hijo se había accidentado y su padre sufrió un ataque de hemiplejia. A la semana siguiente la llamo todos los días, recordaron el último encuentro y el día que se iban a reencontrar la llamó desde el aeropuerto. Ahora se hablan y se escriben, pasarán muchos días hasta volver a pasar las noches frías, muy abrazados. Continúan juntando las ganas, ambos se extrañan y se desean, pero la historia tiene que ver con el vil dinero, el no puede regresar porque dejó su trabajo y entregó su casa, a ella no le va mejor con la “guita” como le llama el.

domingo, 26 de noviembre de 2006

INGLES




No se como empezó o si, lo se, el me encontró y yo lo seguí encontrando todas las veces que el quiso y ahora no puedo vivir sin el...

Voy manejando en la autopista, mano izquierda en el volante, la derecha en mi muslo, no tan cerca de mi ingle, porque van mas autos, camionetas , buses y camiones, no como aquel día, íbamos por la carretera, el tráfico a mas de 100, nosotros a menos, su mano izquierda en el volante, su derecha en mi ingle derecha, recorriéndola. Me pidió reclinara el asiento, llevo mi falda preferida , la de jeans , es verano, hay sol, las ventanas abiertas dejan entrar el olor a la brisa del pasto verde que tanto le gusta, su mirada adelante en el camino, su mano tibia, angulosa dura está quieta entre mis piernas, con todo su peso sobre mi ya húmedo sexo, no te muevas, me pide, rara vez sonríe, su mano no se mueve, pero la siento tierna, acariciadora, acogedora. Miro sus facciones, nariz recta, mandíbula apretada, labios besosos, me mira y sus ojos se ven excitados, ensoñadores; ambos supiramos, mi sexo mas húmedo , mi mano en el borde de la ventana y la otra en su muslo, sobre su jeans, la subo un poco y siento la dureza de su sexo. El nunca pide, pero se que desea mi mano dentro de sus boxers, su delgadez permite se deslice mi mano hasta sentirlo, suave, tibio, duro, sus ingles húmedas y velludas…no la quites, me susurra, la dejo ahí …